Reconocimiento facial: el sistema que te identifica por medio de características biométricas

La seguridad se ha convertido en la obsesión de todo el mundo en esta era donde la información fluye entre ceros y unos de una punta a la otra del planeta en cuestión de segundos. Cuando nuestro dinero se muestra en una pantalla, cuando tenemos información muy importante dentro de nuestro dispositivo electrónico que bien podríamos perder, o que nos podrían hackear, la seguridad es nuestra máxima prioridad, y las empresas de tecnología lo saben, por eso llevan tanto tiempo investigando sobre nuevos sistemas de reconocimiento para el acceso a esa información delicada y privada.

Desde el nacimiento de Internet, lo habitual era siempre utilizar una cuenta personal con una contraseña, pero está claro que este tipo de sistemas no son del todo seguros, ya que ha habido en los últimos años infinidad de fugas y hackeos en los que las contraseñas se han visto vulneradas. Siempre podemos cambiarlas, claro está, pero en estos años también se han desarrollado otro tipo de sistemas de seguridad para el reconocimiento personal mucho más avanzados y seguros. Uno de ellos, el que más está dando que hablar, es el del reconocimiento facial, que a pesar de que todavía no es perfecto, es seguramente el más avanzado y seguro de todos.

¿Cómo funciona este sistema?

No hay un solo sistema de reconocimiento facial, porque cada empresa ha lanzado el suyo, basándose en distintos algoritmos. Eso sí, la gran mayoría de ellos, por no decir todos, tienen la misma base práctica. La persona que quiere desbloquear su dispositivo o acceder a la zona de seguridad debe hacerlo colocándose frente a una cámara, para que ésta detecte sus rasgos y le permita el paso, a través de la confirmación con un fichero madre creado previamente con fotos de esa persona, que sirven a la máquina para crear esa base comparativa que analizará a la hora de dar o no acceso.

Todo se basa en el análisis de las características biométricas de nuestro rostro, que son únicas y personales, incluso en las caras de los gemelos. Tras identificar el rostro que tiene delante, el sistema analizará la imagen y sacará las características biométricas, convertidas ahora en una especie de algoritmo que se compara con los que ya existen en la base de datos. Si hay coincidencia, el acceso será permitido. En el caso contrario, evidentemente, el acceso se denegará. El sistema tiene más de medio siglo, pero es ahora cuando han conseguido perfeccionarlo lo suficiente para que funcione de verdad.

Características del reconocimiento facial

Como decíamos arriba, cada sistema tiene su propia forma de llegar a la identificación y validación del rostro a través de ese reconocimiento facial. Todos los sistemas, sin embargo, cuentan con algunas características comunes, como el hecho de utilizar una cámara especial para que la imagen que se tome del rostro sea exacta, y la base de datos que incluye con todas los parámetros biométricos de los rostros de las personas que tienen permitido el acceso. El proceso para la toma de esos datos suele realizarse a través de un escáner facial.

Dependiendo de lo exacto y potente que sea el sistema, tendrá en cuenta desde nuestros ojos y la posición que hay entre ellos hasta la forma de nuestra nariz o de nuestra boca. Se centra especialmente en la parte central del rostro, ya que la boca, al final, puede estar en otra postura, y el peinado puede cambiar un millón de veces. Lo importante está en el centro del rostro, en las distancias, en los parámetros, en las pequeñas arrugas o surcos, incluso en los lunares, que son detalles que hacen que seamos únicos. Luego todo eso se pasa a nivel informático y se convierte en una ficha a la que el sistema accede cada vez que nosotros queremos desbloquearlo.

Aplicaciones que tiene el sistema

Actualmente hay diferentes y variados métodos por los cuales este tipo de reconocimiento de seguridad se está expandiendo, siempre ligado a la tecnología. Hay dispositivos móviles que ya cuentan con este tipo de desbloqueo a través del reconocimiento facial, llevado a cabo por la cámara frontal del dispositivo. Los que lo han probado afirman que está bien, pero que a veces se hace un poco lento. Eso es un problema si queremos desbloquear el móvil unas treinta veces al día, pero no lo será para el acceso a zonas restringidas en fábricas, por ejemplo, que también utilizan el reconocimiento facial.

Parece algo muy peliculero pero ya está totalmente adaptado para el trabajo en diferentes empresas, incluso para el acceso a ordenadores especiales o proyectos concretos en empresas importantes. De igual forma, algunas entidades públicas y gobiernos también se han interesado por este sistema, para salvaguardar la seguridad de sus sedes o también, para crear un método sencillo y eficaz de reconocimiento que vaya más allá del chip integrado en el carnet de identidad por ejemplo. En China, la expansión de este sistema está siendo increíble, llegando incluso a los bancos.

Principales riesgos del reconocimiento facial

Este sistema, como ya hemos visto, se está implementando en numerosas empresas e incluso también en instituciones, entendiendo que es hoy por hoy la forma más segura de reconocimiento personal que existe. Sin embargo, pese al perfeccionamiento de este método, todavía no está exento de peligros. Uno de los más evidentes es el propio hecho de que con una buena fotografía nuestra y algo de habilidad, cualquiera puede engañar a un sistema de reconocimiento facial no demasiado bueno y hacerse pasar por nosotros.

El tiempo de análisis e identificación también es uno de los problemas principales de este tipo de sistemas, que tardan bastante en lograr una comparación real con los algoritmos que ya poseen, sobre todo si la base de datos es amplia. El hecho de que este tipo de sistemas tenga también nuestros parámetros puede suponer que alguien que acceda a ese sistema, hackeándolo de cualquier forma, podrá variarlos e incluso copiarlos para hacerse pasar por nosotros. Lo electrónico está muy bien y es el futuro, de eso no hay duda, pero también puede ser un auténtico peligro dejar toda nuestra seguridad en manos de este tipo de algoritmos.

Leer más